Una vez que tenemos nuestra despensa acomodada y organizada, es mucho más fácil ver cuales son los alimentos y condimentos con los que contamos para cocinar.
Sin embargo, muchas veces tenemos tantas opciones de alimentos que no sabemos realmente cuales necesitamos y nos encontramos con preguntas como: ¿Cuánto debo comprar de esto? ¿Será suficiente con lo que llevo? ¿Solo me queda poco, comprare más?
¿Te ha pasado esto cuando vas a ser tus compras de la semana?, si es así, aquí te dejamos algunos consejos para que logres tener una despensa no solo organizada sino libre de desperdicios:
1.- Te recomendamos almacenar tus alimentos en frascos transparentes, esto te ayudara a saber exactamente cuánta comida tienes y cuanto de este producto es lo que realmente debes comprar. Muchas veces al estar en cajas o bolsas nos olvidamos de cuanto es lo que aún tenemos ahí.
2.- Antes de hacer tus compras, haz una lista y anota lo que necesitas y lo que ya tienes, es importante estar consiente de los productos que ya tienes en tu despensa para no repetir o comprar de más y acabar desperdiciando.
3.- Al principio será algo difícil, pero si ya llevas haciendo tu despensa a granel por un tiempo procura siempre utilizar el mismo frasco o recipiente para un solo alimento. De esta manera podrás ir midiendo cuanto realmente necesitas y cuál es la cantidad que realmente utilizas a la semana o al mes.
4.- No compres más de un producto si aún te queda más de la mitad del frasco en tu despensa, compra soló lo necesario así evitaras muchos desperdicios y ahorraras algo de dinero.
5.- Revisa todos los alimentos en tu despensa mínimo 1 vez al mes, así te darás cuanta si alguno ya lleva ahí por varias semanas y podrás ver como cocinarlo antes de que tengas que tirarlo.
Aquí te dejamos una pequeña lista de alimentos básicos que te recomendamos tener en tu cocina:
Granos- Son la base para muchas comidas y una gran fuente de fibra procura siempre tener: Arroz integral o arroz salvaje (Encuentra una deliciosa receta aquí) o quinoa.
Pastas- Procura que siempre sean integrales, puedes ir variando entre nuestras diferentes presentaciones como: Fetuccini, fussili o pasta para sopa
Edulcorantes naturales- Despídete de la azúcar refinada de una vez por todas y sustitúyela por Azúcar fruta de moje, azúcar de coco, miel, stevia o dátiles. No necesitas tener todas, prueba de poco en poco y ve cual es la que más te gusta.
Aceites, vinagre y salsas- Algunos de estos son realmente esenciales para cocinar como: Aceite de coco, aceite de oliva, tahini, glee, vinagre balsámico.
Legumbres- Son muy nutritivos y completos, además de ser ricos en nutrientes son una gran fuente de proteínas y fibra. Nuestros favoritos: Lenteja roja, frijol moong, frijol negro, garbanzo.
Nueces- Son un fruto seco rico en antioxidantes, proteínas y fibra. Puedes probar diferentes tipos y estarlos intercambiando por mes para que nunca te aburras de su sabor. Te recomendamos probar: Nuez de brásil, macadamia, nuez de castilla y almendras.
Harinas- Existe una gran variedad de harinas, te recomendamos sustituir tu harina blanca por una harina integral o por una garbanzo o nopal.
Especias- Son esenciales para sazonar casi todas tus comidas y por lo general duran bastante, siempre y cuando las conserves en un recipiente hermético en un lugar seco. Puedes tener muchas, sin embargo te recomendamos siempre tener: Sal de himalaya, pimienta, ajo y cebolla en polvo y bicarbonato de sodio.
Extras- Para completar desayunos, lunch o cenas, siempre es útil contar con los siguientes alimentos: Granola, frutos secos, granos de maíz, algún postre saludable como chocolate amargo o energy balls, etc.
Con solo unos pocos ingredientes en cada categoría, podemos preparar todas nuestras comidas favoritas de manera muy rápida y con el mínimo desperdicio. Usa estos consejos y esta lista como una guía, pero recuerda que puedes agregarle o restarle los elementos que quieras.